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¿Qué es el planeta Tierra?
La Tierra es el hogar de todos los seres vivos. Su edad estimada ronda los 4.550 millones de años, según ha precisado la comunidad científica a nivel mundial.
Pero las primeras formas de vida surgieron unos mil millones de años después. Su nombre se deriva del vocablo latin Terra, que equivale a Gea, en honor a la deidad griega que emula la exclusiva fecundidad femenina.
Gira alrededor de su estrella madre, el Sol, separado por una distancia calculada en alrededor de casi 150 millones de kilómetros. Debido a sus dimensiones, se ubica además en el quinto puesto de los ocho planetas existentes en el Sistema Solar, pero también en tamaño y masa es el mayor de los cuatro que son de tipo rocoso o terrestre.
Esto significa que la Tierra es rocosa, tiene una superficie sólida donde se muestran distintas formaciones geológicas como montañas, cañones, mesetas, llanuras, valles, entre otros. El relieve terrestre, en consecuencia, varía mucho de un lugar a otro.
Lo que no está cubierto por agua tiene montañas, llanuras, desiertos, mesetas, entre otras geomorfologías. Y en la parte inferior del planeta, existen capas de roca y metal. Pero también se ha logrado determinar con estudios geológicos que a mayor profundidad, son mucho mayores también las temperaturas internas.
Igualmente, ostenta una mayor densidad y gravedad superficial, tiene un potente campo magnético y una mayor rotación que lo distingue de los otros tres planetas de características terrestres, lo cual ayuda a la existencia de la vida.
Del mismo modo, hacia los polos o extremos del planeta, se da un fenómeno de congelamiento total de la superficie terrestre con formaciones de hielo sólido.
Son lugares de menor radiación solar. Hacia la Antártida se denomina Indlandsis (cubre alrededor del 87% de la superficie) y hacia el Ártico se dejan ver igualmente gruesas capas de hielo llamadas también casquetes polares.
Pero en el interior de la Tierra, hay una grandiosa actividad geológica que ocurre en una gruesa capa denominada manto, muy sólida pero que contiene un líquido externo que genera un extraordinario campo magnético, así como un núcleo interior mayoritariamente compuesto de hierro (88%).
¿Cuándo se originó el planeta Tierra?
¿Dónde está situado?
El planeta Tierra está ubicado en la segunda galaxia más grande del llamado Grupo Local.
Es decir, un grupo de galaxias más pequeño conocido en la llamad Vía Láctea, que pertenece a un Supercúmulo u otro grupo de galaxias juntas por efecto de la gravedad.
Por eso la comunidad científica en el vasto Universo, ubica a la Tierra, en el llamado Supercúmulo de galaxias Virgo.
La Vía Láctea está considerada como una galaxia espiral grande y la Tierra está ubicada justamente en uno de sus brazos espirales, el brazo de Orión. Forma parte del Sistema Solar, que comprende un grupo de nueve planetas, así como muchos cometas y asteroides que orbitan alrededor del Sol.
La Tierra, en concreto, se ubica como el tercer planeta desde el Sol, en el Sistema Solar, lo que equivale aproximadamente a ⅔ partes de camino desde el mero centro de la galaxia, según los expertos en la materia. Es decir, nos ubicamos a unos 25.000 años luz del llamado centro galáctico.
¿Cuál es la composición del planeta Tierra?
La Tierra tiene una masa aproximada de 5,98×1024 kg. Sus componentes principales son los siguientes, todos indispensables para garantizar la vida.
- Hierro= 32,1%.
Oxígeno= 30%.- Silicio= 15,1%.
- Magnesio=13,9%.
- Azufre=2,9%.
- Níquel= 1,8%.
- Calcio=1,5%.
- Aluminio=1,4%.
Como la masa se segrega, el núcleo se compone fundamentalmente de hierro, en un porcentaje de 88,8%, junto a otras pequeñas cantidades de níquel (8%), Azufre (4,5%) y trazas de otros elementos.
De igual forma, se ha establecido que las rocas más comunes de la corteza terrestre son prácticamente todos los óxidos, es decir hierro, cal, potasa, sosa, magnesia, sílice, alúmina.
Así las cosas, solamente se presentan en muy bajas concentraciones el azufre, flúor y cloro (menos del 1%). Fue el geoquímico F.W Clarke (1847-1931) quien determinó la composición de la corteza terrestre, cuando logró calcular con exactitud que el oxígeno alcanza poco más del 47% .
Capas de la Tierra
Pero también se sabe que en su estructura terrestre, la Tierra se compone de tres capas principales: la Corteza, el Manto y el Núcleo.
La Corteza es la parte más delgada y superficial, compuesta de sedimentos. Después le sigue el Manto, constituido por rocas densa, duras. Representa un 83% del volumen total de la Tierra.
Y el Núcleo, es la parte más profunda y se cree que se compone de hierro en mayor grado que níquel y azufre. El Núcleo es la raíz principal del campo magnético terrestre, que puede verse alterado gracias a los vientos solares, conformados por partículas con carga que el Sol se encarga de expulsar en forma continuada.
¿Qué temperatura máxima y mínima tiene el planeta Tierra?
¿Cuál es su tamaño?
La Tierra tiene las siguientes medidas:
- Diámetro total: 12,756 kilómetros.
- Masa: 5.9722 x 1024 kilogramos.
- Densidad: 5.513 gramos/cm3.
- Volumen: 1,083,206,916,846 km3.
¿Qué forma tiene el planeta Tierra?
Tiene una forma muy similar a la de un esferoide oblato, es decir, una esfera achatada hacia los extremos, pero lo más común es aprender en la escuela lo siguiente: la Tierra es achatada hacia los polos y abultada hacia la zona del Ecuador.
El abultamiento ecuatorial obedece al movimiento de rotación terrestre, el cual genera que el diámetro en esa zona planetaria sea 43 kilómetros más largo que el diámetro que va de un polo a otro.
En diversos estudios serios a nivel científico, se ha establecido al menos hace 22.000 años atrás la Tierra era mucho más esférica y la mayor parte de su hemisferio norte estaba totalmente cubierto por el hielo, pero cuando se fue derritiendo paulatinamente, ejercía una menor presión sobre la superficie terrestre, lo cual ocasionó una especie de rebote.
Es más, los científicos se percataron de que este fenómeno, que siguió ocurriendo hasta mediado de los años 90 del pasado siglo XX, comenzó a invertirse, por lo que el abultamiento empezó a crecer.
Según se desprende de la observación satelital, se ha evidenciado que desde el año 2002 ha habido una pérdida importante de hielo en la Antártida y Groenlandia, que ha ocasionado este proceso gracias a un gran culpable: el calentamiento global.
¿Qué son las placas tectónicas?
La litosfera, una de las capas de la Tierra, está compuesta de fragmentaciones de piezas llamadas placas tectónicas, caracterizadas por una gran actividad, se mueven, están en constante cambio y eso permite la formación de montañas, el fenómeno del vulcanismo y la consabida sismicidad.
Igualmente, las placas tectónicas en movimiento son responsables de la regulación de la temperatura terrestre, porque reciclan gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono, donde los fondos oceánicos se hallan sometidos a constante renovación.
Son varias las placas tectónicas que conforman la superficie terrestre. Estas, a lo largo de millones de años, se han estado deslizando sobre el magma. Las placas se consideran elementos rígidos, que se mueven interrelacionadamente, siguiendo patrones tales como:
Bordes convergentes
Consiste en la aproximación que tienen dos placas tectónicas.
Bordes divergentes
Las placas tectónicas se separan, gracias a grandes movimientos.
Bordes transformantes
La placas se deslizan lateralmente entre sí. Es por ello que en estos bordes de placa se producen los temidos terremotos, temblores de tierra y se forman fosas oceánicas o montañas, y entran en actividad los volcanes.
¿Qué ocurre? En otras palabras, las placas tectónicas comienzan a deslizarse sobre la parte superior de la astenosfera, que es la sección superior menos viscosa y sólida del Manto, que fluye, se mueve, se desliza junto con las placas.
La corteza oceánica está en permanente renovación, gracias a la combinación de esos procesos, donde el fondo oceánico subduce bajo los bordes de las placas, justo en la zona de los límites convergentes. Pero también se crean las dorsales oceánicas con ayuda del afloramiento de material perteneciente al manto en los llamados límites divergentes.
Son 7 las placas tectónicas más grandes e importantes del planeta: la Pacífica, la Euroasiática, la Africana, Indoaustraliana, la Norteamericana y la Sudamericana.
También existen la placa del Caribe, la arábiga, la Indica y la llamada placa Nazca, ubicada en la costa occidental de América del Sur y la placa Escocesa, ubicada al sur del Atlántico.
Las placas de mayor movimiento son las oceánicas, donde destaca la del Pacífico, la cual suele moverse entre 52-69 mm/año y la de Cocos, que avanzó, por ejemplo, con una velocidad promedio en el año 1997 de 75 mm/año.
La erosión de origen tectónico genera a lo largo de extensos períodos de tiempo geológico, un remodelaje de la superficie planetaria, a causa de las precipitaciones, ciclos térmicos y efectos químicos.
Pero también actúan como remodeladores del paisaje terrestre los grandes impactos dejados por la glaciación, meteoritos que caen sobre la Tierra, la acumulación de grandes arrecifes de coral y la erosión costera.
¿Qué es la atmósfera?
El planeta se halla envuelto en una capa muy densa compuesta de diversos gases que la cubren de forma permanente, por acción benévola de la gravedad.
Esa capa, indispensable para la vida de todos los seres vivos, se denomina atmósfera terrestre.
Con la altura, estos gases vitales se hacen menos densos, menos pesados hasta que desaparecen a unos cientos de kilómetros de la superficie. En palabras muy sencillas, La atmósfera es la parte mas gaseosa de la Tierra, pero también la más externa y menos densa.
Eso dio paso a la composición de la atmósfera actual, con concentraciones de nitrógeno-oxígeno ideales, porque propiciaron la aparición de organismos aeróbicos y que la vida fuera del agua fuera posible gracias a la formación protectora de la capa de ozono, que protege a los seres vivos de la fatídica radiación ultravioleta.
La atmósfera también participa en el proceso de transporte del vapor de agua y suministra gases claves, quema los meteoritos pequeños antes de que traspasen superficie terrestre y modera la temperatura con ayuda del llamado efecto invernadero, donde trazas de moléculas en la atmósfera cumplen la función de capturar la energía térmica que se emite desde el suelo, aumentando así la temperatura media.
Estos gases, en concentraciones normales, son beneficiosos. Hablamos del dióxido de carbono, vapor de agua, gas metano y ozono. Sin el efecto invernadero, que retienen el calor, la temperatura superficial promedio de la Tierra alcanzaría -18ºC, imposibilitando la vida.
¿Qué es la hidrosfera?
La Tierra es azul, es un planeta caracterizado por la abundancia de agua, lo cual lo diferencia de los demás planetas que componen el Sistema Solar.
La hidrosfera es la parte líquida de todo el planeta. La hallamos en los océanos, ríos, lagos y en otras formas de configurarse, como en forma de hielo, tal y como ocurre con los glaciares, icebergs y banquisas.
También se manifiesta en estado gaseoso en el aire, cuando el vapor de agua se acumula hasta formar nubes y niebla, o debajo de la tierra, en aguas subterráneas.
Esta capa se ubica entre la atmósfera y la litosfera, es decir, es la zona donde se concentran todas las partes líquidas del planeta, las cuales son:
- Océanos y Mares.
- Ríos.
- Lagos.
- Aguas subterráneas.
- Aguas congeladas.
El sitio más profundo bajo el agua es el abismo Challenger, perteneciente a la fosa de las Marianas en el océano Pacífico, con una profundidad de –10 911,4 metros.
Todos los océanos juntos, la principal masa líquida que compone la hidrosfera está calculada en aproximadamente 1,35 x 1018 toneladas métricas y equivale a 1/4400 de la masa total de la Tierra. Cubren un área de 36,84 x 106 km2. No es poca cosa.
Si se pudiera nivelar toda la superficie terrestre, entonces el agua alcanzaría una altura de 2,7 kilómetros.
¿Por qué el planeta Tierra es habitable?
En primer lugar, el hecho maravilloso de que la Tierra siempre está dando la vuelta alrededor del Sol, el astro mayor que garantiza niveles de luz y calor adecuados para el sostenimiento de la vida.
Es un acto mágico que permite la existencia de miles de millones de animales, plantas y seres humanos que comparten ecosistemas variados.
A lo largo de la historia de la Tierra, la atmósfera y diversas condiciones abióticas han sufrido transformaciones ocurridas por la biosfera planetaria que han permitido la proliferación de organismo aerobios, la formación de una capa protectora de ozono y el campo magnético terrestre.
Se juntan para bloquear la radiación solar maligna y dañina, lo que hace posible la vida tal y como la conocemos hoy en día. Y es que las propiedades físico-químicas exclusivas de la Tierra, su devenir geológico y su órbita han hecho posible el milagro de la vida, por al menos 500 años más, según estimaciones optimistas de algunos científicos de trayectoria.
Otra característica única de la Tierra es su mayoritaria superficie acuática y marina, que garantiza agua para la vida. Es por ello indispensable cuidar las fuentes de agua dulce que tanto el hombre como los animales usan para beber y sobrevivir.
Asimismo, hay una disponibilidad grande de minerales y productos de la biosfera que regalan variados recursos que sostienen a la población mundial, desde alimentos orgánicos hasta productos terminados de todo tipo, cuyo origen se halla conectado a las bondades de la Madre Tierra.
Para saber más, puedes ver: Cueva de Altamira.
¿Qué satélites naturales tiene el planeta Tierra?
Un solo satélite natural sirve a la Tierra: La Luna, que comenzó a rondar sobre un órbita fija a nuestro planeta hace unos 4500 millones de años.
Se la considera un cuerpo terrestre grande, que tiene un diámetro que no cubre la cuarta parte de la Tierra.
Asimismo, es el segundo satélite natural más grande del Sistema Solar, si se le vincula al tamaño de su planeta. El primero es Caronte, que sirve a Plutón.
La luna es responsable de que se estabilice la inclinación del eje terrestre, reduce por tanto, la velocidad de rotaciòn del planeta en forma gradual y provoca el fenómeno de las mareas.
Existe una atracción gravitatoria clave entre la Luna y el Astro Rey, culpable de las aparición de las mareas. Y su periodo de rotación y traslación alrededor de la Tierra es idéntico.
Por lo que siempre tiene la luna la misma cara y afronta el hecho de que a medida que va orbitando la Tierra, siempre es iluminada por el Sol, lo que genera las llamadas fases lunares. Su parte oscura está separada de la parte iluminada del llamado terminador solar.
Para saber más, puedes ver: Equinoccio de otoño y Equinoccio de primavera.
Me gusta colaborar con esta página porque desde bien joven me ha encantado el funcionamiento de la naturaleza y la biología. Tenía claro que quería estudiar algo relacionado con estos temas y por eso me acabé decidiendo por Biología.
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