Contenido del artículo:
¿Qué es el equinoccio de otoño?
El equinoccio es el fenómeno astronómico que involucra dos grandes momentos al año donde el Sol alcanza el cenit, porque se ubica en el plano del ecuador celeste o ecuador terrestre.
Es decir, el punto más alto en el cielo con relación al observador, ubicándose justo por encima de su cabeza, a 90º.
En este momento, la parte más cercana de la Tierra con respecto al Sol, es justamente la zona media o ecuador terrestre. Desde esta óptica, una línea divide la Tierra en dos grandes mitades: una está iluminada por la luz solar y la otra oscurecida.
La primera corresponde al día y la segunda a la noche, porque no inciden sobre ella los benéficos rayos solares. Esa línea divisoria pasa por los polos. Esto se debe a que durante los equinoccios estos polos no se inclinan hacia el Sol o lejos de él.
En consecuencia, en todo el planeta, el día y la noche tienen la misma duración en el equinoccio, con variaciones realmente ínfimas en latitudes diferentes, gracias al tamaño del sol respecto de su punto central y al fenómeno de refracción atmosférica.
De hecho, la palabra equinoccio procede del latín aequinictium, aequus nocte, que quiere decir noche igual. El equinoccio de otoño marca el comienzo de esta bella estación del año que antecede la llegada del invierno.
¿Cuándo comienza el equinoccio de otoño?
Sucede cuando el llamado paralelo de declinación del Sol y el ecuador celeste coinciden dos veces al año, entre el 19 y 21 de marzo y entre el 21 y 24 de septiembre, todos los años.
Justo entonces en ese período del mes de septiembre de cada año, se produce el equinoccio de otoño.
Pero también comienza esta estación marcada por ciertas características medioambientales, donde destacan descensos de las temperaturas y un notorio cambio de color en la vegetación, que se tornara rojiza y amarillenta y muchos árboles pierden temporalmente el follaje a consecuencia de fuertes vientos que les desnudan.
Es además la época donde el reino animal se prepara con la recolección de comida y la creación de refugios o madrigueras para soportar el invierno. El equinoccio, en términos generales, es un marcador astronómico que sirve para establecer en el calendario el inicio de la primavera y el otoño en cada hemisferio terrestre.
En realidad, se trata del instante preciso o la fecha en que ocurren los cambios estacionales, que son siempre opuestos para el hemisferio norte y el hemisferio sur. Es por eso que en el equinoccio de marzo, que aproximadamente se produce el día 20 de marzo, tenemos que:
- En el Polo norte comenzará un día que durará 6 meses.
- La primavera se inicia en el hemisferio norte, es decir, el equinoccio primaveral
- En el hemisferio sur, en cambio, sobreviene el otoño o equinoccio otoñal, con una noche que durará 6 meses.
Y en el equinoccio de septiembre, que sucede entre el 22 al 23 de septiembre, tenemos las siguientes características:
- En el Polo Norte, inicia una noche con 6 meses de duración.
- En todo el hemisferio norte comienza el equinoccio otoñal, el otoño.
- En el hemisferio sur, por el contrario, se inicia un día de 6 meses de duración.
¿Cómo y porqué se produce un equinoccio?
La comunidad científica ha determinado que todos los planetas que integran el sistema Solar experimentan equinoccios y suceden, al igual que en la Tierra, cuando el Sol se halla justamente sobre la zona ecuatorial.
En el caso de la Tierra, poseedora de una división del día que alcanza 24 horas, se producen giros sobre su propio eje con una inclinación de 23.5 grados con respecto al llamado plano orbital.
Significa que cuando la Tierra cumple su órbita anual los hemisferios se inclinan y están, por tanto, más o menos cerca de los rayos solares, lo cual determina la ocurrencia de las estaciones.
Además, este ángulo o línea divisoria entre la parte diurna y nocturna del planeta hace que se experimente la misma cantidad de luz y oscuridad durante todo un día, dos veces al año.
El Sol, en los dos equinoccios anuales, sale por el este y se pone por el oeste. Aunque cabe resaltar que en las latitudes medias el Sol se verá de la siguiente manera:
- Desde el hemisferio norte, en la latitud 0º<lat<90º, el Sol culmina en el punto sur.
- Desde el hemisferio contrario, el Sur, en la latitud –90º<lat<0º, culmina en el punto norte.
Desde el ecuador, llamada también latitud 0º, el Sol sigue una trayectoria aparentemente vertical que nace desde el Este y se pone por el oeste. Justo al mediodía alcanza el llamado cenit del observador.
En el caso de los polos de la Tierra, la vista del Sol para cualquier observador no es la misma: no levanta sobre el horizonte, por el Norte o el Sur. Más bien, hace un círculo rasante y se visibiliza medio disco solar a lo largo de todo el día, porque no amanece ni cae al morir la tarde.
También puede apreciarse una diferencia más: los observadores del hemisferio Norte creen ver al Sol moverse en dirección este-oeste, en sentido horario o retrógrado, mientras que aquellos ubicados en algún punto del hemisferio sur, verán al astro Rey moverse aparentemente también en dirección este-oeste pero en sentido directo o antihorario.
¿Qué diferencia hay entre equinoccios y solsticios?
El equinoccio es un fenómeno astronómico caracterizado por que el día y la noche se igualan en su duración. El solsticio, que quiere decir en latín sol sistere, significa Sol quieto.
En el equinoccio, desde el momento en que ocurre la fecha de su aparición, las horas de la oscuridad y de la luz se irán incrementando, según discurra el otoño o la primavera.
En el solsticio, tenemos que el Sol se encuentra en su punto más bajo o más alto del cielo, dependiendo del hemisferio donde nos alcance el fenómeno. Esto determina la jornada diaria con más o menos horas de luz al año.
Y justo en el punto medio de este recorrido que hace la estrella más importante para la vida en la Tierra, se produce el equinoccio, cuando los rayos solares bañan el ecuador terrestre. Así las cosas, la incidencia de los rayos solares en el hemisferio norte y sur, se reparten por igual, haciendo que el día y la noche tengan la misma duración.
El solsticio es opuesto radicalmente, en ambos lados del globo terráqueo, porque sucede el día más corto y el día más largo. En invierno, se dará el día más corto y en verano el día más largo.
Aunque ambos fenómenos tienen en común que marcan el comienzo de las estaciones, cada uno tiene sus fechas claramente establecidas. Los equinoccios suceden en marzo y septiembre, marcando la llegada de la primavera y el otoño, mientras que los solsticios de junio y diciembre, determinan la llegada del verano y el invierno.
Si la Tierra no estuviera inclinada, parecería que el Sol siempre irradiará sus rayos de vida hacia la zona media o ecuatorial, fenómeno que igualaría la distribución de la intensidad de los rayos solares y la desaparición de las estaciones.
¿Cuáles son las festividades más importantes relacionadas con el equinoccio de otoño?
Alrededor del mundo, se producen diferentes manifestaciones culturales que dan la bienvenida a la llegada tanto del equinoccio de otoño, como el de primavera, el cambio estacional que marca la llegada de un tiempo previo donde hay que prepararse bien para sobrevivir al invierno.
El otoño, en muchas partes del mundo, es fecha propicia para la celebración de rituales alusivos a un periodo transicional que ha marcado a la humanidad desde tiempos inmemoriales.
Implica festejar un equilibrio no visible entre fuerzas, entre el día y la noche, luz y oscuridad. Los festejos del equinoccio de otoño se vinculan además con un tributo a las bondades de la madre tierra, porque en muchas latitudes es tiempo de recoger las cosechas.
China festeja con una fiesta llamada Chung Chiu, que marca el profundo agradecimiento de este pueblo por haber alcanzado el final de la recolección del arroz, por lo que esta fecha también alude a la abundancia.
Entretanto, los judíos mantienen una costumbre bíblica, plasmada en las sagradas escrituras de la siguiente manera: se hace la Fiesta de las Cabañas & rdquor, que coincide con la llegada del otoño, también llena de agradecimiento por los beneficios que proporciona la madre naturaleza.
En la no menos histórica Roma, se producían las llamadas Fiestas Dionisiacas, en conmemoración de la cosecha de la uva, que se celebraba degustando ampliamente la cosecha de vino del año anterior. También se festeja el equinoccio de primavera, con muchas expresiones culturales multicolores que se producen en muchos países que igualmente rinden tributo a la magia de la naturaleza.
- Biogeochemical Cycles: What They Are and How They Work [Types and Examples] - 2 junio, 2022
- Main Characteristics of Biodiversity - 1 junio, 2022
- Types of Biodiversity: [Genetic, Species and Ecosystem] - 1 junio, 2022